Sesamoisitis 

         Además de los huesos normales y constantes del esqueleto humano, pueden aparecer otros huesos inconstantes llamados huesos supernumerarios. Estos huesos supernumerarios no producen patologías ni alteraciones en el organismo en la mayoría de las ocasiones. Se suele saber de su existencia por hallazgos radiológicos.

         Dentro de los huesos supernumerarios existen algunos de aparición constante. El más grande de todos es la rótula en la rodilla. En el pie aparecen de forma constante dos huesos supernumerarios, los sesamoideos. Estos huesos se encuentran situados en la cara plantar del pie, por debajo del primer metatarsiano, este metatarsiano presenta unas hendiduras donde encajan los sesamoideos. Estos huesos son osificaciones que aparecen en el interior del tendón del músculo flexor corto del dedo gordo y sirven de inserción para algún músculo corto del pie.

         Se conoce como sesamoiditis lesiones que afectan a estos huesos por inflamaciones y/o por lesiones en los mismos. Las causas de estas son sobrecargas y traumatismos producidos por el primer metatarsiano.

         En ocasiones se pueden presentar uno de ellos fracturado, sobre todo el interno, siendo normal y no presentar ningún tipo de dolor.

         Esta es una enfermedad más frecuente en mujeres, quizás por en uso de un zapato inadecuado.

         La aparición de esta dolencia puede ser de instauración brusca o traumática o bien por una sobrecarga lenta. La traumática se produce por el atropamiento contra el metatarsiano y el suelo en accidentes en los que se recibe un fuerte golpe en la zona. La causa más común es la sobrecarga lente. En estos casos los sesamoideos se someten a una presión elevada a lo largo del tiempo. Va unida a algunas deformidades como el pie cavo, Flexión plantar del primer metatarsiano; alteraciones del primer radio del pie como el Hallas Valgus (juanetes), Hallux Limitus.

         El dolor se manifiesta en la cara plantar de la cabeza del primer metatarsiano, la zona se encuentra hinchada y a veces presenta durezas y callos.

         El tratamiento consiste en la colocación de una plantilla que corrija y compense la deformidad, descargue la zona, fisioterapia. En caso de existir fractura del sesamoideo en tratamiento consiste en la extirpación de los trozos del sesamoideo roto.